Cada hombre tiene una misión. Un propósito que le llama la atención más que cualquier otro. Un llamado que sacude sus pasiones y lo abruma de deseo. Algo que quiere–y sabe– que puede lograr. Pero hacemos lo posible por no perseguir esa misión. ¿Y qué hacemos mientras? Nos saboteamos con porquerías. Borracheras, drogas, dramas, redes, […]